``Últimamente, el dolor de cadera se está extendiendo
mucho entre los practicantes de actividad física, sobre todo, en deportes de
fuerza o que impliquen levantamientos de peso. Crea un dolor normalmente por la
zona glútea, cadera o ingle durante el ejercicio e incluso llega a molestar en
la vida diaria impidiéndonos realizar actividades cotidianas.
Antes de empezar, y como se ha comentado en
otros artículos del blog, estos son unos puntos muy generales para guiarnos
pero no es un diagnóstico diferencial de por qué se llega a producir este tipo
de problemas y, por supuesto, siempre que tengamos una molestia o lesión de
este estilo, lo más recomendable es ir a un profesional para que evalúe y
valore nuestro dolor para orientarnos lo mejor posible en nuestro problema.
CAUSAS DEL DOLOR
ORIGEN MUSCULAR
1. Psoas Ilíaco
Una de los causantes más comunes en el dolor
cuando es de origen muscular es el Psoas ilíaco. Debido a las relaciones con varias
estructuras del cuerpo que tiene este músculo, sumado a la tensión que llega a
recibir (sobre todo de forma excéntrica), es bastante común que se
hipersolicite o espasme.
2. Glúteo
La importancia de trabajar el glúteo y de
hacerlo de forma correcta está más que tratado. La amnesia glútea es un mal que
incluso en gente “entrenada” también llega a verse por falta de activación y
control motor a la hora de realizar los ejercicios. Ello puede desencadenar
distintas descompensaciones que se reflejan en diferentes problemas.
Uno de ellos, directamente relacionado, es
la excesiva actividad de los isquiosurales, siendo la reacción
más común un acortamiento y la aparición de algunos puntos gatillo. Lo más
problemático son tendinopatías en la inserción proximal (a nivel de los isquiones)
que nos dará ese dolor tan habitual por zona de la ingle y cadera.
3. Aductores
Los aductores, más concretamente el Aductor
mayor, trabajan de forma sinérgica como extensor de cadera. De hecho, con unos
90º de flexión es incluso más eficaz que el mismo glúteo o los isquiosurales
para generar un momento de fuerza más potente debido a sus inserciones.
Esto se traduce en una carga aductora
importante en gestos como peso muerto o sentadilla, sumado a si somos
una persona con la amnesia glútea anteriormente nombrada, tenemos muchas
posibilidades de sobrecargar esta musculatura. Todo esto puede desencadenar
problemas tendinosos y, sobre todo, en osteopatías de
pubis o pubalgias por una excesiva descompensación de fuerzas respecto
a la faja abdominal.
ORIGEN OSTEO-ARTICULAR
1. Choque femoro-acetabular
También conocido como pinzamiento
femoro-acetabular, es una lesión provocada por anormalidades óseas en la
cavidad acetabular que en la mayoría de casos aparecen por repetición de
choques. Esto en los deportes de fuerza suele pasar por forzar la flexión de
cadera de forma excesiva, creando gibas u osteofitos que favorecen la aparición
de la lesión.
Estas deformidades, junto con el continuo contacto
forzado, acaban dañando el Labrum de la cadera (un cartílago que cubre el
acetábulo) y suele ser el origen del dolor, de nuevo por un desgaste excesivo
al forzar rangos de flexo-extensión. Normalmente, la molestia se acrecienta en
flexión y/o rotación interna de cadera.
Es recomendable hacer pruebas de imagen para
descartar esta patología. Si tenemos síntomas o estamos diagnosticados de
pubalgia o choque femoro-acetabular, podemos tener posibilidades de padecer al
mismo tiempo la otra.
Nuestra anatomía de la cadera puede influir
mucho en que seamos más o menos propensos a este tipo de lesión. Para
entender un poco más sobre ello y ver qué limitaciones nos puede ocasionar
tener un tipo u otro de cadera a la hora de hacer una sentadilla:
ORIGEN NEUROPÁTICO
1. Problemas derivados del nervio ciático
El dolor provocado por una “ciática” es bastante
conocido. Un acortamiento del músculo Piramidal produce un atrapamiento del
nervio y nos ocasiona dolor. Pero aparte de este origen más extendido, el
acortamiento muscular de nuestros miembros inferiores puede crearnos la
misma sensación en nuestra cara posterior:
La hiperactividad de los Isquiosurales,
especialmente el Bíceps femoral, puede oprimir el nervio y causar dolor por
todo el circuito donde discurre, creando un dolor semejante al que hemos
nombrado del Piramidal sobre el Ciático.
Igual que en este último punto pasaría cuando se
ramifica el nervio en Ciático en poplíteo interno y nervio Ciático poplíteo
externo (de rodilla para abajo) ocasionado por músculos como el Sóleo, que
pueden comprimir también el nervio y dar la misma sensación dolorosa.
Teniendo en cuenta lo que hemos descrito a nivel
muscular en el punto anterior, una persona con debilidad glútea es más
propensa a este tipo de problemas ya que activará de más toda la musculatura
implicada que hemos nombrado.
2. Hernias discales lumbares
Las hernias pueden darnos dolor por toda la zona
lumbo-pélvico, sobre todo durante un ataque agudo. Este tema tiene muchas
variantes fisiopatológicas y clasificaciones, por lo que lo dejaremos para
profundizar posteriormente en otros artículos.
CONCLUSIONES
Dados todos los orígenes posibles que hemos
visto, es primordial que tengamos un buen diagnóstico para saber con exactitud
de dónde viene nuestro dolor, para solucionarlo y prevenir en el futuro su
aparición.
Si sufrís alguno de los síntomas descritos
recomiendo acudir a vuestro fisioterapeuta y médico de confianza para que os
oriente y priorice sobre si es necesario pruebas complementarias, tratamiento
manual o readaptación (donde ya entraría un entrenador).
A continuación nombraré algunas pautas para
prevenir estos problemas de cara al entrenamiento. Recalcar, como siempre, que
son indicaciones generales y lo ideal es tener un profesional que nos guíe e
individualice.´´
No hay comentarios:
Publicar un comentario